Ted V. Mikels, uno de los reyes del cine z norteamericano, ha muerto

Ted V. Mikels, uno de los reyes del cine z norteamericano, ha muerto

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Ted V. Mikels, uno de los reyes del cine z norteamericano, ha muerto

Ted V. Mikels, uno de los directores esenciales del cine de serie z norteamericano, ha fallecido a los 87 años de edad en Las Vegas. Mikels estuvo ocho años luchando contra una enfermedad -por el momento no ha trascendido cuál- que finalmente ha podido con él, impidiendo de esta forma que llegase a su ambicioso objetivo de vivir 104 años.

Nacido el 29 de abril de 1929, Mikels debutó en la gran pantalla en 1963 con ‘Strike Me Deadly’, cinta que también escribió y produjo. Poco después llegarían títulos como ‘Dr. Sex’, ‘One Shocking Moment’ o ‘The Black Klansman’, pero sería en 1968 cuando alcanzó su momento de mayor esplendor gracias a ‘The Astro Zombies’, una película cuyo presupuesto ni tan siquiera ascendía a 40.000 dólares.

Para ‘The Corpse Grinders’ dispuso de algo más de dinero -tampoco mucho, que ni llegaba a 50.000 dólares-, aunque él mismo reconoció en su momento que creía que no más de una o dos personajes del equipo técnico hubieran trabajado previamente en una película. Eso no fue obstáculo para que se convirtiera en un gran éxito, reportando unos ingresos que Mikels estimó en su momento en unos 10 millones de dólares, aunque no muchos años antes la cifra que él mismo aportaba era de apenas 3.

Por desgracia, el público fue perdiendo paulatinamente el interés en su cine, lo cual provocó una drástica reducción de obras realizadas durante los años 80, década en la que apenas dirigió dos películas. Eso cambió a finales de los 90, aunque posteriormente se apoyó demasiado en las secuelas de sus dos grandes éxitos, rodando una de ‘The Corpse Grinders’ -hubo también una tercera entrega que él ya sólo produjo- y tres de ‘The Astro Zombies’.

Su último trabajo tras las cámaras, ‘Paranormal Extremes: Text Messages from the Dead’ data del año pasado y actualmente estaba involucrado como director de segunda unidad en el remake de ‘The Corpse Grinders’ que prepara el realizador alemán Timo Rose. Está por ver si su fallecimiento afectará de alguna forma a la puesta al día de uno de sus títulos más celebrados.

A lo largo de su carrera también tuvo tiempo para producir títulos ajenos como ‘Niños, no jueguen con cosas muertas’ (‘Children Shouldn't Play with Dead Things’), la mítica película de Bob Clark, y para rodar varios spots televisivos con los que se ganó principalmente la vida durante los años 80, que fue cuando se mudó a Las Vegas.

Además, no se olvidó de llevar un peculiar estilo de vida que rivaliza en excentricidad con sus propias películas, ya que durante una temporada hasta vivió en un castillo junto a un harén de varias mujeres. Eso también le causó problemas económicos, llegando a estar en bancarrota en 2009, apenas un año después del estreno de ‘The Wild Word of Ted W. Mikels’ un documental narrado por John Waters, uno de sus mayores admiradores -otro que quizá os suene responde al nombre de Quentin Tarantino-.

Descanse en paz.

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